PROGRAMA DE INTERVENCIÓN
COMUNITARIA
Fundamento Conceptual

La alianza, entre la universidad y la comunidad, es uno de los temas relevantes que se abordan hoy en la educación superior chilena e internacional. Cada vez son más las universidades que se plantean la necesidad de dar oportunidades de aprendizaje asociadas a situaciones y contextos reales, a la vez que entregan oportunidades para resolver necesidades específicas a nivel comunitario (Tandon, 2015). Por otra parte, está la motivación cada vez mayor de las universidades de incorporar la formación ética y ciudadana con el fin de asegurar calidad en la educación superior (Martínez, 2010), y generar conocimiento orientado a mejorar las condiciones de vida de las personas, incluyendo su voz y experiencia, junto con facilitar acceso a información y difusión de conocimiento a todos los actores involucrados (Tandon, 2015). A nivel internacional y nacional, estas iniciativas se enmarcan dentro de lo que se ha denominado Aprendizaje y Servicio, que es un “servicio solidario destinado a atender necesidades reales y sentidas de una comunidad, protagonizado activamente por los estudiantes desde el planeamiento a la evaluación y articulado intencionadamente con los contenidos de aprendizaje. Esta institución educativa, a través de proyectos planificados curricularmente, con sus estudiantes en acción, en comunidad, atiende problemáticas comunitarias sin perder su especificidad de institución formadora” (Malacrida, M.G., 2012 pg. 27). Sin embargo, cabe preguntarse qué entendemos por aprendizaje y servicio, llegando a la conclusión de que existen diferentes miradas respecto de la metodología y el grado de involucramiento que tienen que tener los estudiantes con la vida comunitaria y, por ende, con los resultados que se logran tanto en los estudiantes, como en la comunidad. Es en este contexto, que el diseño del Programa de Intervención Comunitaria tiene un sustento teórico fuerte, que combina teorías del aprendizaje situado con el modelo de Determinantes Sociales de la Salud, el Bienestar Social y Subjetivo, y el Desarrollo Comunitario. Por tanto, entiende la intervención comunitaria y la producción de conocimiento, como un ejercicio conjunto de aprendizaje para estudiantes, docentes, y líderes sociales.

Las bases conceptuales y metodológicas del Programa dan sustento a la articulación y triangulación del quehacer de los componentes pedagógico, territorial y de investigación para que en su conjunto aporten a mejorar las condiciones de vida de una comunidad. Es en el encuentro con la comunidad y el aporte que se hace a ella donde, en conjunto con líderes sociales, se genera el aprendizaje significativo para los futuros profesionales de UDLA.

La apuesta del Programa de Intervención Comunitaria radica en situar al desarrollo comunitario como una estrategia articuladora de los componentes descritos, que impacta en cada uno de los actores de una manera diferente.